Petrificado

¡No mames! ¡Verde!. ¿Alguna vez has sentido como un trancazo sin que te peguen? ¿Como si te desmayaras?. Un instante de tu vida en el que no puedes ni exhalar ni inhalar. Una pausa que te deja petrificado. Que congela tus emociones y pasan mil cosas por tu cabeza mientras sucede. Un suspiro interrumpido. Te cae de golpe un peso impresionante.

Aquí va lo que me pasó. Estaba en la biblioteca de la Universidad, cuando de repente pasó. Me volteó a ver, no hay duda de ello. Yo la voltee a ver, no hay duda de ello. Se me quedo viendo, no hay duda de ello, yo sin querer me le quedé viendo. (Estaba petrificado). Como de esas veces en las que el cuerpo se desconecta del pensamiento. No hay control. Cuando te das cuenta de lo que pasó reaccionas de forma animal. Te convulsionas hacia el otro lado, lo obvio, lo indiscreto, lo brutal.

Background: Una niña que escribe. Un niño que dizque escribe. Un niño que admira lo que escribe la niña. Una niña asustada por los halagos del niño. Un niño que sin intentarlo parece que acosa a la niña. Una niña que se siente acosada. Un niño que se encontraba en la biblioteca. Una niña que pasa y se queda viéndolo con cara de…. ¡Puta Madre! ¡No se con que cara! Pero fue intenso. Lo más idiota es que ni siquiera era la niña, sino una a la que se le parecía. ¿O sí era?


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